Camanchaca se abre a Bolsa
Tras la primera y única apertura en Bolsa del 2010, Camanchaca lograba recaudar en su primer día (1 de diciembre) US$ 227 millones por el 31,5% de la propiedad (1.327.372.400 acciones). El precio por la colocación fue de $ 82 por acción. Este último, fue levemente inferior al mínimo que se ofrecía de $ 85 por acción.
"No existía problema alguno vender las acciones a $ 85, pero los socios que ofrecían $ 82 eran extraordinarios. Estos incluían AFP y varios inversionistas de alto patrimonio que a largo plazo dan peso, estabilidad y seriedad a la compañía", manifestaba a través de un comunicado de prensa el gerente general de Camanchaca, Francisco Cifuentes Correa, el día en que iniciaron su presencia en la Bolsa de Comercio de Santiago (BCS).
La asignación de acciones para los fondos de pensiones era de 28%; para el segmento institucional, 26%; fondos extranjeros, 9%; NIMS, 9%; y para retail, 28%.
En tanto, la prorrata para los fondos de pensiones alcanzaba un 50,44%; institucionales, 32,39%; fondos extranjeros, 41,47%; NIMS, 26,16%; y retail, 21,31%.
Los recursos serán destinados al plan de negocios de la empresa, específicamente a financiar el capital de trabajo, aumentar la producción de salmónidos y afianzar su posición en el mercado. Además, Camanchaca renegoció todos sus pasivos a una tasa conveniente a siete años, lo que le permite facilidad para desarrollar sus programas.
"A raíz de este proceso, la industria del salmón tiene un gran programa de crecimiento. De las 8 mil toneladas actuales, se pretende lograr una producción de 40 mil toneladas el 2012, 50 mil el 2013 y casi 60 mil el 2014. En cuanto al uso de los recursos, US$ 100 millones van a ser destinados para reducir la deuda, y los otros US$ 120 van a quedar en caja para financiar el plan de desarrollo del salmón y capital de trabajo para alimentar los salmónidos", explicaba por su parte el presidente de la compañía, Jorge Fernández Valdés.
En cuanto a la baja productividad que ha tenido la empresa en el último año, el ejecutivo aseveraba que el sector se ha visto golpeado por una temperatura inferior a lo normal en el mar. "En el negocio pesquero hay ciclos de mayor y menor abundancia. Eso está determinado por la temperatura de los mares, las corrientes y el alimento. Hemos tenido un ciclo frío en el mar en los últimos años y eso ha sido muy negativo para el sector. Debemos acostumbrarnos a vivir con una menor cuota, pero es nuestra responsabilidad sacar un mayor rendimiento. Los volúmenes han sido menos a lo esperado, pero los precios suben y afortunadamente la demanda de consumo de pescado es cada vez mayor", agregaba el gerente general, Francisco Cifuentes.
En relación con el aumento de talla de algunas especies al momento de exportar que han planteado las autoridades del sector, Cifuentes sostenía que no afectaría mayormente a la industria, porque cuando la talla es mayor hay que esperar un poco más, pero con menos pescados se obtiene el mismo tonelaje. "Esas medidas me parecen correctas. Ayuda a preservar la especie. Es algo valorable", concluía Cifuentes.
Drástica reducción en cuotas de captura
Corría la tarde del jueves 9 de diciembre y el Consejo Nacional de Pesca (CNP) aprobaba la propuesta de cuota de jurel de 315.000 toneladas para el 2011 presentada por la Subsecretaría de Pesca (Subpesca). La cifra representó un 76% de disminución respecto a la cuota global del 2010 que alcanza a 1.300.000 toneladas.
El Subsecretario de Pesca, Pablo Galilea, manifestaba en la ocasión que esta drástica reducción se debe al estado crítico del recurso. "Con este resultado podremos liderar la batalla por la conservación del recurso en la próxima reunión de la Organización Regional de Pesca para el Pacífico Sur (ORP), a realizarse en enero del 2011 en Cali (Colombia), en donde esperamos sensibilizar a los otros Estados en cuanto a la necesidad de reducir las cuotas globales de jurel en el Pacífico Sur. La decisión adoptada por el Consejo demuestra que en este sentido, todos los actores se encuentran alineados en torno a la necesidad de preservarlo", aseguraba Galilea.
Además del jurel, el CNP aprobó las propuestas de cuotas hechas por la Subsecretaría de Pesca para merluza común, con 48.000 toneladas, que representaron una disminución del 13%; merluza del sur, con 24.000 toneladas, descendiendo en un 8% respecto con el 2010; merluza de cola entre las regiones de Valparaíso y Magallanes, con 123.000 toneladas, disminuyendo en 20%; y congrio dorado, con 2.900 toneladas, lo que representó un 22% menos.
Previamente, en la sesión del 30 de noviembre el Consejo Nacional de Pesca sancionaba la propuesta de crustáceos, quedando conformadas de la siguiente manera: la cuota del camarón nailon entre las regiones de Antofagasta y Biobío se redujo en 300 toneladas (5%), quedando en 5.200 toneladas; la del langostino colorado entre las regiones de Arica y Parinacota y Coquimbo se redujo en 280 toneladas (12%), estableciéndose en 1.979 toneladas; y la del langostino amarillo de las regiones de Atacama y Coquimbo se mantuvo en 3.100 toneladas. Además, la merluza de tres aletas entre el paralelo 41°28,6´ L.S. y la Región de Magallanes se aprobó con 25.000 toneladas, reduciéndose en 2.000 toneladas respecto con el 2010 (7%); y la sardina española entre las regiones de Atacama y Coquimbo mantuvo la cifra del 2010 de 2.500 toneladas. Respeto con las cuotas que quedaron pendientes para segunda consulta en la sesión anterior, el CNP rechazaba las cuotas de anchoveta y sardina española entre las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá y anchoveta entre las regiones de Atacama y Coquimbo, adoptándose el 80% de la cuota del 2010. De esta manera, la anchoveta y la sardina española entre las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá quedó en 1.016.000 toneladas, mientras que la anchoveta entre las regiones de Atacama y Coquimbo quedó en 84.800 toneladas.
Para el subsecretario de Pesca, la suma de todas estas votaciones ha dado un resultado positivo, pues, como explicó tras la histórica reunión del 9 de diciembre, "todas las otras propuestas de cuotas para las pesquerías que fueron sustancialmente disminuidas han sido ampliamente respaldadas por el Consejo, lo que demuestra la responsabilidad y compromiso de los señores consejeros con la sustentabilidad de los recursos", concluía Galilea.